En los últimos años, la impresión 3D ha pasado cada vez más de la creación de prototipos y la producción de muestras a la fabricación industrial de uso final. Los materiales utilizados en la impresión 3D también han evolucionado desde polímeros comunes hasta polímeros de ingeniería y, finalmente, hasta polímeros de alto rendimiento. A medida que la gama de materiales se vuelve más eficiente, se establecen los mismos requisitos de alto rendimiento para las propias impresoras 3D.
Si desea utilizar toda la gama de materiales de manera confiable y con alta calidad, necesita una impresora 3D con cámara calefactada que pueda alcanzar hasta 250 °C. La impresora 3D miniFactory Ultra ha sido desarrollada y optimizada para la impresión 3D de plásticos especiales y, a pesar de las temperaturas extremas de procesamiento, los usuarios pueden fabricar piezas de manera segura con los polímeros y compuestos poliméricos de mayor rendimiento del mundo.
Una impresora 3D con cámara calefactada permite la impresión 3D de polímeros técnicos y de alto rendimiento con la misma alta calidad con la que los materiales PLA se imprimen a temperatura ambiente. Cuanto mayor sea la temperatura en la cámara calefactada, mayor será la gama de materiales que se pueden imprimir. La cámara calefactada está diseñada para mantener la pieza imprimible a una temperatura óptima durante todo el proceso de impresión y, por lo tanto, garantizar que la pieza se construya de manera uniforme sin generar tensiones internas. La temperatura óptima de la cámara para la impresión de polímeros amorfos – por ejemplo, ULTEM1010, ULTEM9085, PPSU, TPI, PEKK-A o PC – se encuentra cerca de la temperatura de transición vítrea del material.
Cuando la cámara de impresión se calienta cerca de esa temperatura, el material permanece relajado y libre de tensiones internas durante todo el proceso de fabricación. A medida que la pieza se enfría lenta y uniformemente después de la impresión, se obtiene la mejor precisión dimensional y durabilidad mecánica. En las impresoras 3D industriales miniFactory, la cámara de impresión puede calentarse hasta 250 °C, lo que permite a nuestros clientes acceder a una gama extremadamente amplia de materiales. La temperatura de la cámara calefactada es la característica más importante en una impresora 3D cuando se evalúa la gama de polímeros de alto rendimiento que se pueden imprimir con alta calidad.
A grandes rasgos, los polímeros se pueden dividir en tres grupos: polímeros comunes, polímeros técnicos y polímeros de alto rendimiento. Para polímeros comunes como PLA y PETG, una cámara calefactada no es prácticamente necesaria. Sin embargo, para polímeros técnicos como ASA o ABS, la temperatura de la cámara debe alcanzar aproximadamente 85 °C. En el caso del PC, se requieren alrededor de 130 °C en la cámara para garantizar una calidad de impresión óptima. Al pasar a los polímeros de alto rendimiento, los requisitos de temperatura de la cámara aumentan significativamente.
PEKK-A se puede imprimir óptimamente en una cámara a aproximadamente 150 °C, mientras que ULTEM 9085 requiere 180 °C. Si consideramos otros materiales como ULTEM1010, PSU, PPSU o TPI, los requisitos de temperatura de la cámara aumentan hasta 215-240 °C. La miniFactory Ultra viene con perfiles de impresión listos y optimizados para los polímeros técnicos y de alto rendimiento más conocidos. Los usuarios también pueden añadir nuevos materiales al dispositivo en cualquier momento, ya sea de forma independiente o con nuestra ayuda.
La temperatura óptima para la cámara calefactada es la temperatura de transición vítrea (Tg) del polímero utilizado. La cámara calefactada es la característica más importante para lograr el mejor resultado.
Temperaturas óptimas de la cámara para algunos polímeros de alto rendimiento:
La temperatura de la cámara de impresión está cerca o por encima de la temperatura de transición vítrea (Tg) del polímero.
Las impresoras 3D industriales miniFactory permiten una impresión de alta calidad en una amplia gama de materiales, ya que la cámara calefactada puede calentarse hasta 250 °C. Gracias a nuestra tecnología avanzada, la cámara alcanza los 250 °C en menos de 30 minutos. Esto le permite comenzar a imprimir rápidamente, evitando largos tiempos de precalentamiento. Gracias a nuestro sistema de materiales abierto, los usuarios no tienen que pagar tarifas de licencia anuales por los materiales utilizados. Además, hay varios materiales a su disposición en comparación con los sistemas cerrados. Así, con un solo dispositivo, puede imprimir todo el espectro de materiales hasta un 50 % más barato que con dispositivos vinculados a los propios materiales del fabricante, que generalmente son mucho más caros.
¡Renovemos juntos la fabricación de sus piezas!
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